Dos luchadores mexicanos luchan fuera del ring.
String Fighters es un cortometraje sobre dos luchadores mexicanos que se enfrentan en la estación de metro Lyon Bellecour. Fue creado por cinco artistas durante su cuarto año en la Escuela Emile Cohl de Lyon, como parte del proyecto París-Lyon-Singapur, que presenta cortometrajes estudiantiles en el festival de Annecy.
Los dos personajes principales (luchadores mexicanos) y una serie de personajes secundarios indefinidos, una puesta en escena inusual para un combate (una estación de metro), un conflicto externo, un enfoque cómico y un énfasis en la acción física son los elementos principales del cortometraje.
Ambientado en una estación de metro y dentro de un tren de metro, se ha dedicado un buen esfuerzo al diseño del entorno y los personajes, así como a representar las multitudes y poblar los escenarios.
String Fighters emplea una estética estilizada que combina con éxito elementos en 2D y 3D. La paleta de colores se ha utilizado para resaltar a los luchadores.
El ritmo visual es alto, manejado a través de la edición, el movimiento dentro del encuadre y los movimientos de cámara (inclinación, paneo, dolly, zoom rápido y sacudidas de cámara). El cortometraje claramente ha sido diseñado con una estética visual dinámica en mente.
Abundan los planos amplios, incluidos los planos largos y los planos generales, para capturar los entornos y la acción. También hay algunos planos más ajustados, pero la cámara está enfocada en la pelea más que en las emociones de los luchadores durante la mayor parte del cortometraje. Una gran idea de los artistas fue mostrar a los pasajeros del metro ajenos a la pelea, por lo que la falta de emociones contrasta con la intensidad y lo extraño de la puesta en escena elegida. Se convierte en un espectáculo exagerado sin espectadores.
¿Qué hace que String Fighters funcione tan bien? Un guion divertido, una puesta en escena inusual que contrasta con los personajes y las acciones, una dirección dinámica, una combinación exitosa de elementos 2D y 3D, y un humor sutil.
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