Ultraman Rising destaca principalmente por su impresionante enfoque visual, que fusiona la estética tradicional del anime y manga con las innovaciones más recientes en animación digital. Este largometraje, que marca el regreso de ILM (Industrial Light & Magic) a la animación de características, es un ejercicio de estilo y tecnología. Bajo la dirección de Shannon Tindle, la película apuesta por un aspecto visual que no solo mantiene la esencia de la franquicia original, sino que también lo lleva a un nuevo nivel con una impresionante combinación de técnicas de animación y efectos visuales.
Uno de los mayores retos a los que se enfrenta el equipo creativo de ILM es mantenerse fiel a la estética del arte original mientras incorporan los elementos necesarios para una película de animación moderna. El Supervisor de Efectos Visuales, Hayden Jones, explica que el equipo tiene que lidiar con el desafío de crear una película que respete las reglas de iluminación y estilo del arte de la producción, que combina técnicas de manga y anime. A lo largo del proceso, se trabaja para que los personajes, los fondos y los efectos visuales se mantengan lo más cerca posible del estilo visual de los bocetos originales de los diseñadores de arte Marcos Mateu Mestre y Sunmin Inn.
El resultado es un mundo estilizado que se siente casi pintado a mano, donde cada elemento visual está cuidadosamente diseñado. La clave aquí es el uso de texturas y filtros. El equipo emplea una técnica que simula un acabado a base de rotuladores y acuarelas, logrando una atmósfera única que refleja el estilo visual de los cómics y los mangas japoneses. El uso de texturas horneadas es crucial para conseguir el aspecto deseado. Estas texturas ayudan a que los personajes y escenarios tengan una sensación táctil, casi como si se tratara de ilustraciones, pero al mismo tiempo permiten que la animación tenga la fluidez necesaria para una película de acción.
Los efectos especiales también juegan un papel esencial en la identidad visual de la película. En lugar de emplear efectos tradicionales de explosiones o rayos láser, el equipo de ILM se basa en referencias de anime y manga para crear efectos visuales estilizados. Las explosiones se diseñan como formas modulares que permiten ser moldeadas para ajustarse a la estética del filme. Este enfoque les permite controlar la forma y el color de cada explosión, infundiéndolas con un estilo gráfico único que complementa la animación general. Los rayos láser y las secuencias de Spacium Beams de Ultraman, Emi y Gigantron también se diseñan con una atención especial a los detalles visuales, asegurando que cada uno de estos ataques tenga su propia personalidad y se alinee con la atmósfera general del filme.
Una de las características más destacadas de la película es la animación de los ojos de Ultraman, que es un desafío, ya que en la serie original los ojos de Ultraman no se mueven. En Ultraman: Rising, el equipo se enfrenta a la dificultad de dar vida al personaje de Ultraman, que tiene un rostro estático, pero de alguna manera debe mostrar emociones y movimiento. Después de muchas pruebas, se opta por animar los ojos, permitiendo que su expresión cambie según las emociones del personaje, lo que añade una capa de humanidad al superhéroe y mejora la conexión emocional con el público.
Los detalles culturales también son una prioridad en el proceso de diseño. Si bien Tokio se presenta de manera estilizada, no se deja de lado la autenticidad. Elementos como los palillos, la manera en que los personajes se comportan al comer, e incluso la representación de lugares reales como la Tokyo Tower o el restaurante Tonkatsu Tonki, están cuidadosamente integrados en la narrativa. Además, los diseñadores crean una versión estilizada de Tokio que, aunque no es fotorealista, tiene detalles que los fanáticos de la ciudad reconocerán al instante.
La HDR (High Dynamic Range) también es fundamental en la creación visual de Ultraman Rising. ILM aprovecha las ventajas de la tecnología HDR para enriquecer la paleta de colores y darle más profundidad a las escenas. Esto permite una gama de colores mucho más amplia, lo que resulta en momentos visualmente impactantes, como el uso de luces brillantes y cielos de tonalidades moradas en las batallas finales. Esta mayor saturación y rango de luz contribuye a la atmósfera fantástica y sobrenatural que caracteriza a la franquicia Ultraman, y que aquí se lleva al siguiente nivel.
El diseño de los personajes también juega un papel crucial en el desarrollo visual de la película. Ken Sato, el protagonista, y otros personajes como Emi, el kaiju bebé, tienen un diseño muy específico que resalta mediante el uso de peinados estilizados y ropa. En el caso de Ken, su cabello no se simula de forma realista, sino que se diseña con formas escultóricas, lo que mantiene el estilo gráfico de la película. Para Emi, la animación de sus movimientos está inspirada en niños pequeños, tomando como referencia videos de los hijos de los miembros del equipo, lo que permite que los movimientos de Emi sean tanto adorables como impredecibles, capturando la esencia de su naturaleza juvenil.
Además, la película presenta varias secuencias clave, como cuando el personaje de Ultraman cambia entre su forma humana y la de Ultraman para tranquilizar a Emi. Estas escenas no solo destacan la animación de los ojos de Ultraman, sino también la habilidad del equipo de ILM para manejar momentos dramáticos y cómicos de manera que se sientan naturales y fluidas dentro del universo visual.
Ultraman Rising es un espectáculo visual que va más allá de una simple adaptación de la franquicia original. La película se distingue por la calidad de su animación, la fidelidad al arte original y la implementación de efectos especiales innovadores. Con un estilo único que combina la tradición del manga y el anime con la animación digital moderna, Ultraman: Rising es una obra que no solo rinde homenaje a los fans de Ultraman, sino que también ofrece una nueva perspectiva visual que puede ser apreciada tanto por los seguidores de la franquicia como por los nuevos espectadores.