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El auge de la industria de los VFX en Asia
La industria de los efectos visuales (VFX) en Asia está experimentando un ascenso meteórico gracias a una combinación de factores poderosos. Según Merzin Tavaria, Co-Fundador y Presidente de Producción Global en DNEG, la región cuenta con una vasta cantidad de artistas altamente capacitados, lo que representa una base fundamental para la creación de efectos visuales de primer nivel.
El VFX en Asia, especialmente en países como India, Corea del Sur, Japón, China, Taiwán y Singapur, está jugando un papel cada vez más importante en el ecosistema global de efectos visuales. Ciudades como Seúl, con estudios como Dexter Studios, están viendo un crecimiento significativo. Dexter, que comenzó en 2012, ha crecido hasta convertirse en una empresa integral que no solo se dedica a la producción de efectos visuales, sino también a áreas como el contenido inmersivo y el metaverso. Este estudio ha trabajado en exitosas producciones como Parasite (2019), que ganó cuatro premios Oscar, entre ellos Mejor Película, gracias a sus efectos visuales invisibles que contribuyeron significativamente a la atmósfera de la película.
El crecimiento de la industria de los efectos visuales en Corea del Sur se ha acelerado con el aumento de producciones locales y la participación en proyectos internacionales. La popular serie Squid Game, que ganó un Emmy por los efectos visuales, también destaca el talento y la calidad de los estudios de VFX en la región.
En India, compañías como DNEG también juegan un papel crucial, con equipos que contribuyen a grandes producciones internacionales como Dune: Part Two y Oppenheimer. La disponibilidad de talento altamente calificado en países como India ha permitido a las empresas locales colaborar estrechamente con estudios occidentales, consolidando aún más la presencia global de Asia en el mundo de los VFX.
El crecimiento de plataformas de streaming como Netflix y Disney+ ha sido otro factor clave en este auge, ya que la demanda de contenido de alta calidad ha impulsado la necesidad de efectos visuales excepcionales, especialmente para audiencias asiáticas que buscan historias que reflejen sus propias culturas y estéticas.
En resumen, el auge de la industria de los VFX en Asia está siendo impulsado por un talento en expansión, la adopción de tecnologías de vanguardia y una colaboración global cada vez más estrecha, posicionando a la región como un jugador clave en el futuro de los efectos visuales.