Y ya que estoy, continúo con la falacia de la representatividad. ¿cuántos votantes de IU estarán contentos con la cesión de sus votos al p que han hecho? En los tiempos que corren, nunca ha sido más fácil preguntar de verdad al pueblo (a todo el pueblo) que opina en un determinado asunto. No se pueden cambiar las cosas desde dentro, porque los de dentro no tienen la más mínima intención de que cambie nada. Las leyes las hacen ellos, y tú no las votas. Tú votas (si lo haces) a alguien que tiene un cierto programa (o no, igual sólo es por corporativismo) y luego ellos harán lo que les rote basándose en que, como les has votado, tienen legitimidad para hacer lo que les salga. Y entonces, como de costumbre, se les castigara con el voto en las próximas elecciones, (en otras palabras, que se salen con la suya tan ricamente y en las próximas elecciones, en vez de votar a a votaran a b o en vez de a b votaran a a, o votaran a un c que no tendrá ni representación a poco que te distraigas).
Eso me indigna. Yo quiero enchufar mi DNI electrónico en algún lado, entrar en algún lado y hacer click en algún lado. Por ejemplo, para votar a favor de la rebaja de los sueldos de los cargos, o de la supresión o limitación de sus pensiones a posteriori, o del número y uso de los coches oficiales. Quiero poder decir que partidas presupuestarias quiero que potencien (I+D o educación, por ejemplo) y cuáles no (armamento), quiero poder decir que quiero una república y no quiero a la iglesia inmiscuida en el estado (con todos mis respetos para los seguidores de ambos estamentos del medievo). Quiero prohibir la tauromaquía, quiero potenciar las renovables, quiero limitar la natalidad a un hijo por persona, facilitar las adopciones, eliminar tanta burocracia como sea posible en cualquier ámbito.
¿Cómo hago todo eso? Pues tengo dos opciones, esperarme a que lo arreglen desde dentro, o irme a Canadá.