Mi regalo fue esperar justo a las 0:00h, para apagar el ordenador (que en ese momento estábamos jugando al half-life2) para desearle feliz día de los enamorados con un achuchón de los que cortan la respiración.
Sin regalarle nada, ella se quedó así simplemente por el hecho de haberme acordado. Ver esa carita bien vale el aguantar el rollito de San Valentín.Debo tener mucha suerte, porque eso lo oigo mucho como algo típico, pero a mí no me suele pasar.Cita:
Que esta noche no pueden decir que les duele la cabeza.