En Nueva Orleans, un grupo de diseñadores ha creado algo realmente único: una silla de ruedas completamente fabricada mediante impresión 3D para niños de 2 a 8 años. Esta silla, conocida como el Toddler Mobility Trainer (TMT), no solo ofrece movilidad a los más pequeños, sino que también busca solucionar un problema importante: el alto costo de los dispositivos de movilidad para niños, que pueden llegar a miles de dólares. El objetivo de MakeGood NOLA, el laboratorio que desarrolló esta silla, es que la tecnología sea accesible para todos.


Impresión 3D: el futuro de la movilidad

Lo interesante de esta silla es que todo su diseño, desde el marco hasta las ruedas, los neumáticos, el asiento y hasta las correas, puede ser impreso con una impresora 3D estándar. El fundador de MakeGood, Noam Platt, menciona que esta silla es modular y que cualquier pieza que se dañe se puede imprimir de nuevo en lugar de reemplazar toda la estructura. Así, la silla se convierte en una opción más sostenible, ya que reduce los desechos y los costos de mantenimiento.

Un diseño colaborativo y accesible

El TMT no fue creado en un laboratorio cerrado, sino que se desarrolló con la colaboración de terapeutas de todo el mundo. El diseño modular y fácil de ensamblar permite que cualquier persona con acceso a una impresora 3D pueda fabricar la silla, sin necesidad de herramientas o pegamento. Además, este dispositivo se puede personalizar según las necesidades específicas de cada niño, como incluir soporte para dispositivos respiratorios o ajustarse a diferentes colores.


Un enfoque centrado en las personas con discapacidad

Desde su fundación en 2021, MakeGood NOLA ha entregado más de 1,600 dispositivos personalizados a familias sin costo alguno. La organización no solo se dedica a fabricar productos, sino que también trabaja estrechamente con las personas con discapacidad y sus cuidadores, involucrándolos en todo el proceso de diseño para crear soluciones que realmente respondan a sus necesidades. El equipo de MakeGood busca una verdadera colaboración con el usuario final, lo que hace que el diseño sea aún más efectivo.

Acceso gratuito y futuro prometedor

Actualmente, cualquier persona interesada puede solicitar una silla TMT de forma gratuita, y una vez que el diseño final esté listo, MakeGood comenzará a producir y enviar sillas personalizadas a las familias. Como el proceso de impresión 3D es tan accesible, las sillas se imprimirán según las necesidades específicas de cada niño, garantizando que cada silla esté adaptada y lista para su uso. Y lo mejor de todo es que el diseño de la silla será disponible como descarga gratuita para que cualquiera pueda beneficiarse de esta innovadora solución.

¿Quién diría que una impresora 3D podría revolucionar la forma en que pensamos sobre la movilidad? Parece que la tecnología no solo está cambiando la industria, sino también la vida de aquellos que más lo necesitan.