Última edición por Quel; 03-03-2006 a las 12:12
500 internal server error.
http://blogging-works.blogspot.com/
Editado.
Buenísimo, aunque me veo reflejado.
[quote]Borrar.
Amparo. En un bosque había un oso y un conejo que se llevaban fatal. Estaban todo el día peleándose y discutiendo. Un hada que pasaba por allí les dijo que, si dejaban de discutir, les concedería tres deseos. El oso y el conejo aceptaron. - Venga oso, tu primero. ¿Cuál es tu 1º deseo? -mm, quiero, tener la cara muy larga. -concedido -dijo el hada, y le otorgo una polla larga. - ¿y tú primer deseo conejo? -mm, quiero una conejita que me quiera mucho. -concedido -dijo el hada, y al acto apareció una conejita muy guapa. - Oso, ¿Cuál es tu segundo deseo? -a ver, quiero que todos los osos de este bosque sean osas. -concedido - Dijo el hada, y todos los machos osos se convirtieron en hembras. - Conejo, ¿tú segundo deseo? Quiero una moto. -concedido -dijo el hada, y apareció una moto muy cara y muy guapa. -oso, este es tu último deseo, piénsalo bien y ten cuidado. - De acuerdo, se lo que quiero, quiero que todos los osos del mundo sean osas y jugar con todas. -(con cara de asco) concedido -dijo el hada, y todos los osos del mundo se convirtieron en osas. -conejo, lo mismo te digo, piénsatelo. El conejo se sube a su moto, con la chica abrazada por detrás, enciende el motor y dice. Quiero que el oso sea guapo.
El de inglés me ha encantado que manera de reír a estas horas.
Editado: ha salido doble.
El crimen del padre gumaro. El nuevo padre de la parroquia estaba tan nervioso en su primer sermón que casi no consiguió hablar. Antes de su segundo sermón, el domingo siguiente, preguntó al arzobispo como podría hacer para relajarse. Este le sugirió lo siguiente: la próxima vez, coloco unas gotas de vodka en el agua y va a ver que, después de algunos tragos, va a estar más relajado.
El domingo siguiente el padre aplicó la sugerencia, pero no contó el número de gotas y se pasó. Pero, en efecto se sintió tan bien que podría hablar hasta en medio de una tempestad, su emotividad causó hasta desmayos y hubo una mezcla de conmoción y emoción extrema entre los feligreses. Al finalizar el sermón, ya totalmente relajado, regresó a la sacristía y encontró una nota del arzobispo que decía lo siguiente:
Apreciado padre gumaro: la próxima vez, coloco unas gotas de vodka en el agua y no unas gotas de agua en el vodka. Le anexo algunas observaciones para que no se repita lo que vi en el sermón de hoy: no hay necesidad de poner limón y mucho menos escarchar con sal el borde del caliz. Aquella caseta, al lado del altar es el confesionario y no el baño. Evite apoyarse en la imagen de la virgen y mucho menos abrazarla y besarla. Existen 10 mandamientos y no 12. Los apóstoles eran 12 y no 7, y ninguno era enanito. Caín asesinó a Abel, no le rompió la madre. La santa cruz no es la volteada esa. No nos referimos a nuestro señor Jesucristo y sus apóstoles como. C. & comp, compañía. No nos referimos a judas como cabrón lengua larga no debe tratar al papa por el padrino. Bin laden no tuvo nada que ver con la muerte de Jesús. El agua bendita es para bendecir y no para refrescarse la nuca. Nunca rece la misa sentado en la escalera del altar y mucho menos con el pie sobre la biblia. La biblia, a propósito, no es ningún libro bien poca madre. Dios no les dio la expulsacción a Adán y Eva del paraíso. Las hostias son para distribuirlas en el pueblo. No deben ser usadas como aperitivo para acompañar el vino y no saben mejor con atún o cajeta. Los pecadores van al infierno y no a chingar a su madre. La virgen de la concepción y las 1000 vírgenes no son concha y las muchachas. La iniciativa de llamar al público para bailar fue buena, pero eso de hacer tren por toda la iglesia, no, el aseréjé no es un salmo. Atentamente, el arzobispo.
Posdata: aquel tipo sentado en el rincón del altar, al cual usted se refirió como putín y travestí con falda, era yo.
el sentido común es el menos común de los sentidos
Carta de una madre para su hijo informático. Querido hijo: A la vista esta que desde que comenzaste tus estudios de informática tu nivel de comúnicabilidad con el resto de tu familia ha ido en receso, al igual que tú capacidad para mantener un mínimo orden en tu mesa de trabajo y resto de tu habitación. Es por ello que he decidido tomar cartas en el asunto y ponértelo de manifiesto en los mismos términos que empleas a diario para dirigirte a nosotros, tu familia.
Viendo que tú sistema operativo no te permite mantener optimizado tu entorno de trabajo ni tus unidades de almacenamiento, he creído conveniente desfragmentar el espacio libre y poner orden en tu sistema de archivos.
Así pues, he liberado cantidad de espacio en tus unidades de alta capacidad (estanterías) y en las unidades extraíbles (cajones). He habilitado, junto a tu acceso telefónico, un espacio reservado a tus documentos, en el cual se encuentra tu libreta de direcciones y tu portapapeles, y he dejado espacio suficiente para que tengas acceso directo a tus herramientas de escritura y dibujo. También he vaciado la papelera y restaurado la configuración visual de tus paredes, eliminando esos wallpapers tan pasados de moda.
Al escanear el resto del entorno, encontré algunas particiones ocultas, tales como el espacio entre el colchón y el somier. Te recomiendo que guardes el software de anatomía visual en carpetas poco accesibles a tus hermanos, que aún son menores de edad, si no quieres sufrir la censura de la b. S. Ao, en su defecto, de tus padres.
La ropa sucia la he procesado con un programa largo y comprimido en tus unidades extraíbles. Te recomiendo que actualices más a menudo tu ropa interior, o de lo contrario habrá que pasarles periódicamente un antivirus.
Como sé que encontraras cierta dificultad a la hora de adaptarte a este nuevo orden, he sobrescrito la tabla de contenidos de tus unidades para que te resulte más sencillo encontrar lo que busques. Claro que puedes encontrar algún bug, es la primera vez que hago de administrador de sistemas. Si detectas alguno, comunícamelo y desarrollaré un patch.
Por último, he minimizado el desorden general de tu armario, he maximizado tu área de estudio y he puesto en funcionamiento un bucle condicionado que limitara tus recursos en caso de que no mantengas optimizado tu entorno.
Espero que todos estos cambios mejoren tu rendimiento y no sea preciso hacer overclocking en tus horas de estudio, ni limitarte el ancho de banda en tus comunicaciones.
Qué bueno te dicen eso y empiezas a plantearte que realmente estas dentro de Matrix y lo peor de todo, que merovingio se ha enrollado con mama.
Acababa de salir de la ducha, la mujer esta de pie delante de su marido totalmente desnuda, quejándose de que sus pechos son muy pequeños. En vez de salir al paso con el típico no te preocupes cariño, el marido sale con una sugerencia:
-Si quieres que tus pechos crezcan, lo único que tienes que hacer es todas las mañanas coger un poco de papel higiénico y frotarlo entre ellos durante unos segundos.
Desesperada y con ganas de probar lo que sea, la mujer toma un pequeño trozo de papel y lo empieza a restregar entre los pechos mirándose al espejo.
-¿cuánto va a tardar en hacer efecto? -pregunta la mujer.
No te preocupes, irán creciendo a lo largo de los años.
La mujer se detiene y mira con desconfianza al marido:
-¿Qué te hace pensar que frotarme un trozo de papel higiénico entre los pechos todos los días hará.
Que crezcan?
-Bueno, ha funcionado con el culo, ¿no?
El protagonista de la historia sobrevivió, y con terapia intensiva es probable que algún día pueda volver a andar con normalidad.
Un buen día, un hombre, en plan buenecito, le está friendo unos huevos para el desayuno a su mujer. De pronto, la mujer entra en la cocina y a grito pelado le dice:
-Cuidado. No me lo puedo creer. Pon un poco más de aceite. Por dios. Estas cocinando demasiados al mismo tiempo. Demasiados. Dales la vuelta. Dales la vuelta ahora necesitamos más aceite. Por dios. ¿dónde vamos a conseguir más aceite? Se van a pegar cuidado, cuidado. Te he dicho que cuidado. ¿pero que haces? Que se rompen. Pero mira la yema. Dios mío, nunca me haces caso cuando cocinas. Nunca, cuidado. Que saltan, ¿es que no lo ves? Se está manchando toda la cocina. Pero baja el fuego y dales la vuelta por dios. Trata de darles la vuelta. ¿estás loco? Usa la cabeza. ¿has echado sal? Échales sal. Sabes que, siempre te olvidas de la sal. La sal. La sal. Usa la sal por dios la sal.
El marido la mira con asombro, y replica:
-Pero ¿se puede saber que te pasa? ¿crees que no sé freír un par de huevos?
La mujer responde tan tranquila:
-Para que te enteres de lo que es conducir contigo, gilipollas.
Xxxxxd que bueno el de las tetas. Tremendo, aja, me imagino la situación. El otro ya lo habían contado, pero da igual también es muy bueno.