Bien, el propósito del hilo es mostrar la mejor idea qué he tenido en años respecto a mi carrera como animador aficionado: comprarme una pizarra, hacerme con unas tizas y plantar la cámara digital a dos metros, de modo que nadie se atreva a tocarla JAMÁS.
Creo que este es el método más rápido que existe para salvar la barrera qué existe entre el sofá y un dibujo animado: lejos de preparación de acetatos, papel en blanco y rotuladores, o la laboriosa plastilina, o la titánica tarea de hacer un corto en 3D, lo que cuesta encender la cámara y ponerse a dibujar con una tiza blanca en una mano y una esponja en la otra, es una sensación tan placentera qué la recomiendo vivamente.
Evidentemente esto no deja de ser un ejercicio, que no se salvaría de la idéntica tarea de la preproducción: preparar un guión, una pista sonora, un diseño de personajes y una detallada plantilla de movimientos de cada detalle de los dibujos; es más, como cada fotograma se DESTRUYE al menos parcialmente, es necesario memorizar más o elaborar un sistema más eficiente, si lo que queremos es hacer algo serio.
Pero más allá de su adecuación a proyectos grandes o de la calidad de los resultados, la técnica de la pizarra la recomiendo como un ejercicio sublime de animación, especialmente para los que llevamos toda la vida iniciándonos.
Aquí van, en mí canal de vimeo:
De Pesca
El Gigante
Las gafas 3D de Platón
Bladimir Ros - 1960
La historia de Eli (trailer)