El estudio Reburn, formado por antiguos miembros de 4A Games, ha presentado La Quimera, un shooter futurista que combina acción intensa y tecnología avanzada. Ambientado en una Latinoamérica distópica, el juego promete una experiencia inmersiva con mecánicas innovadoras y una historia que transporta a los jugadores a un mundo donde las compañías militares privadas dominan el campo de batalla.


Un futuro caótico y fragmentado

La historia de La Quimera se sitúa en el año 2064, en un mundo donde los antiguos estados han colapsado debido a desastres naturales y conflictos globales. En este nuevo orden, los gobiernos han desaparecido y las corporaciones utilizan mercenarios para imponer su voluntad. Es en este contexto donde los jugadores se enfrentarán a enemigos humanos y mecánicos, utilizando un exoesqueleto altamente personalizable para adaptarse a distintos estilos de combate.

Acción cooperativa y tecnología avanzada

El juego no solo ofrece una campaña en solitario, sino que también permite formar equipos de hasta tres jugadores. Las armas y dispositivos tecnológicos juegan un papel clave en la jugabilidad, proporcionando herramientas estratégicas para enfrentarse a adversarios bien organizados. Además, una inteligencia artificial avanzada acompaña al protagonista, brindando información táctica y asistencia en situaciones de alto riesgo.

El legado de 4A Games en un nuevo camino

Aunque el estudio Reburn está compuesto por exdesarrolladores de la saga Metro, esta nueva producción no es una continuación de sus trabajos anteriores. Tras la reestructuración de 4A Games y la compra de su sede en Malta, algunos de sus antiguos miembros decidieron seguir su propio camino, dando forma a un estudio independiente. No obstante, la influencia de Metro sigue presente en La Quimera, especialmente en su ambientación detallada y su narrativa envolvente.

Un estreno prometedor para los amantes de la acción

Con gráficos de última generación y un diseño que combina realismo y ciencia ficción, La Quimera ha generado gran expectativa entre los jugadores. Su propuesta de combate táctico, exploración y personalización lo convierte en un título a tener en cuenta dentro del género de los shooters futuristas. La llegada de este nuevo proyecto refuerza la tendencia de videojuegos con historias profundas y mecánicas innovadoras, asegurando que la acción no se limite solo a disparar, sino también a vivir una experiencia inmersiva.