La mayoría de los ordenadores actuales parecen tener una guerra declarada contra los puertos. En especial los portátiles, que llegan con dos entradas USB-C y una promesa de minimalismo que en realidad significa: Vas a necesitar un dock. Entra en escena el Anker Prime Thunderbolt 5 Dock, un aparato que parece salido de un laboratorio de Apple de los noventa, pero que esconde tecnología más veloz que el Wi-Fi del vecino al que le robas señal.

Menos cables, más orden

Este dock se conecta a tu ordenador con un solo cable, pero de ahí salen conexiones como si fuera una central de mandos. Tienes puertos para pantallas, discos duros, red Ethernet y hasta lectores de tarjetas. ¿Es una estación espacial? No. ¿Es una caja mágica para poner orden en tu escritorio? Tampoco. Es un ladrillo tecnológico que transforma el caos de los cables en algo razonable.


Más vertical que la competencia

A diferencia de otros docks que se extienden como mantas por el escritorio, este va en vertical. Ocupa menos espacio y, con un poco de suerte, no termina sepultado entre papeles, bolígrafos y tazas vacías. Eso sí, cuidado si quieres ponerlo bajo un iMac: puede que tengas que calzar el ordenador como si fuera una silla coja.

Un desfile de puertos

Aquí va una lista breve, porque si se enumeran todos los puertos en voz alta, parece que uno está cantando los ingredientes de una paella:

  • USB-A y USB-C por delante y por detrás
  • HDMI y DisplayPort
  • Ethernet de 2.5 Gb
  • Lectores de tarjetas SD y microSD
  • Thunderbolt 5 con carga rápida

Todo eso desde un solo cable al ordenador. Es como tener un pulpo con vocación de secretario técnico.


El lector de tarjetas con complejo de ninja

El único detalle que confunde es el lector de tarjetas SD. Está escondido en un lateral, como si tuviera vergüenza de ser usado. Si lo vas a utilizar seguido, asegúrate de que no quede pegado a la pared ni a una torre de libros. Porque meter una tarjeta allí puede convertirse en una misión de sigilo.

Rendimiento sin quejas (salvo por el precio)

La velocidad es su gran virtud. Si conectas un SSD rápido, verás que la diferencia con enchufarlo directamente al portátil es mínima. Además, puedes cargar el portátil, el móvil, el reloj, y seguir teniendo margen para conectar pantallas externas sin que el dock levante vuelo.

¿Es caro? Pues sí

No es el dock más barato, ni de lejos. Pero si ya tienes un portátil con Thunderbolt 5 (o 4, que también sirve), es una inversión que da orden, rendimiento y estabilidad. Y evita que tu escritorio se convierta en una serpientera de cables.

Para quién es este cacharro

Este dock es para quien vive entre videollamadas, discos externos, tarjetas de memoria y pantallas adicionales. También para quien necesita desconectar el portátil y llevárselo a otra parte sin tener que desenchufar ocho cosas como si fuera la cabina de un avión.