Hace un tiempo os comenté que iba a poner algunas prácticas de profundidad de campo y velocidad, y se me había pasado completamente.
Así pues, las fotografías de profundidad están echadas jugando con distintos valores del diafragma (lo más cerrado posible, medianamente abierto, y lo más abierto posible) para conseguir distintas profundidades de campo (compensando las velocidades de obturación para mantener la luminosidad), y con diferentes velocidades (velocidad alta, velocidad media, velocidad baja) para las de velocidad (compensando la apertura del diafragma para mantener la luminosidad). Ha sido un poco una locura, por el jaleo de la puesta en escena, pero también fue divertido, alla vamos.